sábado, 15 de agosto de 2009

La soledad

La soledad,
aquella amiga cuando es querida
y enemiga cuando huimos de ella.

A veces,
nos acompaña
pues estamos solos.
Otras,
nos recuerda
lo transparente que somos.

Algunos no la conocen,
otros la ignoran,
y otros, en cambio,
escapamos de ella.

Vivirla,
te hace odiarla
y luchar
para olvidarla.

Nadie se merece;
hablar,
y no ser escuchado.
Estar,
y ser ignorado.
Llorar,
por sentirse olvidado
o quizás nunca valorado.

jueves, 13 de agosto de 2009

Verano

Verano, esos meses del año que todo el mundo está deseando que lleguen. Suele ser sinónimo para mucha gente de muchas cosas y todas ellas buenas: vacaciones, diversión, sol, playa, calor, relax, salir, viajar, en definitiva hacer todo lo que nos gustaría hacer el resto del año pero no podemos por los estudios o trabajo. Pues bien, por increíble que parezca hay personas a las que no nos gusta el verano. Cuando el sol, el calor y la playa no te gustan, cuando odias a todos los "guiris" que invaden tu ciudad y todo está preparado para ellos olvidando que también existen turistas españoles, cuando las acepciones de salir y diversión se te van olvidando debido a todo el tiempo que llevas sin salir y divertirte, cuando viajar es sinónimo de pasar de estar en una casa a estar en otra a 1000km de distancia y cuando lo único que haces es echar de menos a todo el mundo; pues lo único que deseas es que de una vez llegue septiembre y volver a la rutina, aunque eso también signifique empezar con los exámenes de septiembre. Pero al menos sabré que estaré en mi hogar, en mi ciudad con mi gente y a una temperatura a la que mi cuerpo puede sobrevivir sin deshidratarse.

miércoles, 12 de agosto de 2009

"Es importante tomarte tiempo para decirle a quién quieres que le quieres mientras pueda escucharte." (Antomía de Grey)


A veces suceden cosas que te hacen darte cuenta de lo vulnerables que somos las personas. Suceden hechos inexplicables, pues nadie es capaz de entender como una persona de tan sólo 26 años, en teoría con buena salud pueda perder la vida de forma natural, sin ningún accidente de por medio. Algo así puede sucederle a cualquiera, y eso sólo hace que con más motivos nos demos cuenta lo importante que es aprovechar al máximo el día a día. Por eso, no podemos dejar para mañana aquello que queramos decirle a las personas que queremos. Nunca sabemos cuando puede ser demasiado tarde, y peor es vivir con la sensación de saber que no me hemos dicho un te quiero a tiempo.